El ajuste silencioso. Pronunciamiento del Foro de Economía Alternativa y Heterodoxa sobre el programa económico del gobierno ecuatoriano
El Ajuste silencioso
del gobierno ecuatoriano
de Lenin Moreno
Pronunciamiento
del Foro de Economía Alternativa y Heterodoxa a propósito del Programa
Económico de Estabilización Fiscal y Reactivación Productiva del gobierno de
Lenin Moreno
El 2
de abril de 2018, el Presidente Constitucional del Ecuador, Lenin Moreno, ha
dado a conocer el “Programa Económico de
Estabilización Fiscal y Reactivación Productiva”, en el que propone cuatro
ejes y 14 medidas y acciones de política económica, entre las cuales cabría
destacar, entre las más importantes, a las siguientes medidas:
· El compromiso de reducir el déficit fiscal del 5.64% en el 2018 al
2.47% en el 2021;
· La reducción anual del gasto del Estado en 1.000 millones de USD
por año;
· El incremento temporal de techos arancelarios para bienes de
consumo;
· La amnistía tributaria para pequeñas, medianas y grandes empresas
y en plazos diferenciados;
· La eliminación gradual del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD);
· Un programa de exenciones tributarias para las nuevas inversiones;
· La renegociación de la deuda externa;
· La flexibilización laboral;
· La eliminación del anticipo al impuesto a la renta;
· La consolidación de las Alianzas Público-Privadas para varios
sectores económicos;
· La liberalización de la balanza de capital por la vía de la
apertura a la banca financiera transnacional; y,
· El impulso al fomento de la economía popular y solidaria.
Este
conjunto de medidas se contextualizan en un ambiente en el cual la sociedad
ecuatoriana resiente del modelo político y económico instaurado en el periodo
2007-2017, y que utilizó al Estado y a la institucionalidad pública para
consolidar la dominación política sobre la sociedad por un solo partido
político (el partido político Alianza País), y que generó un ambiente de
autoritarismo, corrupción y abuso de poder.
En
esas circunstancias, el discurso que pregona la reducción del tamaño del
Estado, la disciplina fiscal, y la privatización, entre otros conceptos, y que
hacen referencia al Consenso de Washington y las reformas neoliberales que le
son inherentes, suscita acogida en la sociedad y empieza a convertirse en
hegemónico en los medios de comunicación y en el debate público.
Así,
el actual gobierno, para distanciarse del anterior régimen político y crear
condiciones propias de gobernabilidad, ha considerado conveniente adscribirse a
la crítica neoliberal del Estado y buscar alianzas políticas con los grandes
grupos empresariales y sectores financieros a quienes considera como los
actores fundamentales para la reactivación económica y, de esta manera,
contradice su discurso político, su adscripción ideológica, su programa
electoral y sus promesas de campaña.
Ante
ese escenario, el Foro de Economía
Alternativa y Heterodoxa considera conveniente realizar las siguientes
críticas y puntualizaciones al Programa Económico presentado por el gobierno de
Lenin Moreno:
1.
Las medidas expuestas no
están articuladas de forma coherente con la necesidad de liquidez, reactivación
económica e impulso de la demanda, porque no contemplan aspectos fundamentales
de toda estrategia de reactivación, como por ejemplo: (i) políticas de tasas de
interés; (ii) políticas de mercado interno; (iii) políticas de articulación
sectorial entre agricultura, industria, servicios, y desarrollo científico-tecnológico;
(iv) políticas selectivas de tributación directa e indirecta; (v) políticas
salariales; (vi) políticas de balanza comercial; (vii) políticas de seguridad
social, entre otras.
2.
El programa económico de estabilización fiscal
no es realista con la meta anunciada de reducción del déficit fiscal, porque no
considera el hecho que una economía dolarizada no tiene instrumentos de
política monetaria para amortiguar los efectos de la balanza de pagos sobre la
economía y, al mismo tiempo, la
necesidad de liquidez interna. En efecto, la meta de déficit fiscal que se ha
propuesto el régimen (2,47% del PIB para el año 2012), es incompatible con la
dolarización de la economía, porque la dolarización se sostiene, al menos desde
el año 2014, en el endeudamiento público externo.
3.
El Programa Económico
presentado por el gobierno, convierte a los grandes empresarios en los sujetos
fundamentales de la reactivación económica, en un contexto en el cual los
grandes grupos económicos se han caracterizado por su débil responsabilidad
tributaria (los grandes grupos económicos aportaron, en promedio, con el 2,29 %
del PIB en impuesto a la renta, a pesar de haber obtenido ingresos por cerca
del 57,8% del PIB); por su poder de dominancia de mercado (casi todas las ramas
productivas son controladas por monopolios y grupos económicos); por su
permanente afán de búsqueda de rentas (la deuda de los diez principales grupos
económicos al SRI y por contribuciones fiscales no pagadas fue, en el año 2017,
de 1.776, 5 millones de USD); por las externalidades negativas que generan y
por su escaso aporte en generación de empleo, innovación tecnológica y
mitigación del cambio climático.
4.
El Programa Económico propone
una amnistía tributaria para todos los sectores económicos en un contexto de
reactivación económica y crecimiento del PIB, lo que genera riesgo moral para
todas las actividades económicas, en virtud de que aquellas empresas que
cumplieron adecuadamente con sus responsabilidades fiscales reciben una señal
contradictoria que premia el incumplimiento tributario.
5.
El Programa Económico no
considera el hecho que la economía ecuatoriana está saliendo de la recesión
económica del periodo 2015-2016, gracias al consumo de los hogares y el impulso
de la demanda agregada interna. En efecto, la reducción anual de 1.000 millones
de USD por la vía de la disminución del gasto público tiene efectos directos
sobre la demanda agregada interna y, por tanto, sobre el crecimiento de la
economía. En este sentido, la propuesta gubernamental tiene un sesgo recesivo
sobre el crecimiento y el empleo.
6.
El gobierno ha cedido a la
presión de los grandes grupos empresariales en su demanda de eliminar el
Impuesto a la Salida de Divisas (ISD); sin embargo, este es un impuesto de
comportamiento que busca disuadir la fuga de capitales y conservar niveles
adecuados de liquidez interna para sostener la dolarización. Una eliminación
del ISD implica menores costos de transacción para la fuga de capitales y crea
una situación de riesgo moral sobre la liquidez interna porque se convierte en
una amenaza inminente sobre la dolarización.
7.
El gobierno de Lenin Moreno
ha cedido, asimismo, a la presión de los grandes conglomerados empresariales
que consideran fundamental la flexibilización laboral. En ese sentido, el
régimen dice acoger las necesidades en materia laboral de los sectores
agrícola, turismo, pesquero, que tendrían necesidades propias de contratación
laboral. No obstante, los sectores señalados por el gobierno se caracterizan
por mantener una alta dominancia de control de mercado de los grupos
económicos. En efecto, para el sector turismo se puede constatar la posición
dominante del grupo Futuro S.A., (familias Sevilla, Navarro, entre las más
importantes); para el sector agrícola de los grupos Pronaca (familias Bakker, Klein, Vilaseca,
entre las más importantes) y el grupo transnacional Nestlé; y para el sector
pesquero del grupo Omarsa (familia Vanoni Darquea). La flexibilización laboral
perjudicaría directamente a los trabajadores mientras que beneficiaría a grupos
económicos que mantienen posiciones de monopolio y de dominación de mercado. A
través de la flexibilización laboral, estos grupos pueden obtener mayores
excedentes económicos que los consolidan en sus posiciones de monopolio.
8.
En virtud de que en el año
2018 el gobierno utilizó como variable de ajuste la inversión pública que
descendió del 14% del PIB en el año 2014, al 5% del PIB en el año 2018, es de
suponer que la estrategia de Alianzas Público-Privadas que propone el gobierno
se sustentará en una transferencia de infraestructura y servicios públicos
hacia el sector privado, bajo modalidades de concesión de servicios o
administración compartida o única, y que implican, de hecho, la privatización
de la infraestructura pública, bajo la argumentación que el Estado no
dispondría de recursos para su mantenimiento y reinversión.
9.
La liberalización de la
balanza de capitales por la vía de la apertura a la banca financiera
transnacional, no considera el hecho de que las crisis financieras y monetarias
de fines del siglo pasado, y las crisis de las hipotecas sub prime en EEUU y
Europa, se suscitaron, precisamente, por la desregulación financiera y la
apertura indiscriminada de las cuentas de capital. La banca financiera
internacional necesita sustentos en la economía real para consolidar sus
niveles de apalancamiento. La industria financiera internacional ha
desarrollado complejos productos financieros como los derivados financieros, o
las transacciones de alta frecuencia, y está íntimamente vinculada a la
denominada shadow bank. Con esta
medida, el régimen expone al país a los riesgos de la globalización financiera.
Existe una ingenuidad, por decirlo de alguna manera, por parte del régimen que
cree que la apertura de la cuenta de capital implicaría disminución de la tasa
de interés, cuando las experiencias históricas demuestran justamente lo
contrario.
10.
El programa económico carece
de una visión social y es incompatible con la propuesta “Toda una Vida”,
presentada por el actual gobierno como eje central de la política pública. En
efecto, al existir altos costos de transacción para la desvinculación laboral
en el sector público, lo más probable es que el ajuste y la reducción del
tamaño del Estado impliquen la desarticulación de programas sociales, programas
de vivienda, programas de educación y salud. El régimen, de esta manera,
sacrifica su política social para salvar los equilibrios fiscales y proteger
los ingresos de los grandes grupos económicos.
Las
medidas propuestas por el régimen de Lenin Moreno están plenamente sintonizadas
con las demandas de las grandes empresas y de los sectores neoliberales. A
pesar de su forma y de su discurso en el cual ratifica su voluntad de no
imponer “paquetazos económicos” (como se conocen a las medidas económicas de
shock), en realidad el programa presentado por el gobierno puede ser calificado
como un programa de ajuste silencioso,
o ajuste blando. En ese sentido, este
programa prefigura nuevos programas de ajuste macrofiscal que se irán
radicalizando a medida que la sociedad procese sus consecuencias sin mayor
resistencia y oposición.
Este programa de ajuste blando o silencioso,
en realidad va a concentrar el ingreso y va a acentuar la desigualdad social.
La disminución del tamaño del Estado tendrá como variable de ajuste la supresión
de programas de atención social para poblaciones pobres y vulnerables. La
flexibilización laboral acentuará la precarización del empleo. Las excesivas
concesiones tributarias a los grandes empresarios acentuarán sus impulsos de
búsqueda de rentas instaurando desequilibrios e injusticias tributarias que
castigan a los más pobres y que incentivan a los empresarios a incumplir con la
normatividad vigente. La paulatina supresión del ISD instaurará un ambiente de
incertidumbre sobre la dolarización. Empero, el país sigue necesitando
políticas de reactivación económica y redistribución del ingreso, habida cuenta
de los altos niveles de subempleo y desempleo abierto existentes.
Es
momento que el régimen de Lenin Moreno, rectifique el sesgo empresarial y
neoliberal de su política económica y evalúe las probables consecuencias de su
Programa Económico, sobre todo para los sectores más pobres y vulnerables de la
sociedad que serán quienes, para variar, asuman directamente los costos de este
programa económico de ajuste blando. Además, el programa económico de
estabilización fiscal presentado por el gobierno afecta la frágil
gobernabilidad existente en el país y contribuye a crear un ambiente de
incertidumbre política, conflicto social, al tiempo que acentúa la brecha del
ingreso entre los más ricos y los más pobres.
Como
Foro de Economía Alternativa y Heterodoxa, le hemos entregado al Sr.
Presidente, un conjunto de medidas económicas que, lamentablemente, ni una sola
de ellas fueron consideradas como parte de una estrategia de reactivación con
equidad y sustentabilidad. No obstante, esas medidas económicas presentadas y
discutidas con el Presidente de la República y su gabinete económico, son el
referente que es posible otra economía y que existen alternativas viables y
posibles a los ajustes silenciosos.
Quito,
9 de abril de 2018
Por el
Foro de Economía Alternativa y Heterodoxa
Pablo
Dávalos A. …
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